Te cambio mis versos más secretos, mi aliento, la yema de mis dedos...
Te cambio mis ganas, mis abrazos soñolientos, mis palabras desnudas...
Te cambio todas las promesas que me quedan por cumplir, todos los atardeceres que nos perdimos, todos los mapas del deseo...
Te cambio todo el calor de mi cuerpo por una tarde de lluvia. Juntos.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario